Riotorto
Riotorto, en el siglo XVI aparece la primera referencia documental en la que figura el nombre del municipio, cuando el 16 de mayo de 1509, la Real Cancillería de Valladolid expidió un pleito entre el obispo de Mondoñedo Diego de Muros y el señor feudal Álvaro González, que concluyó con la declaración de Riotorto como propiedad del obispado. Pasado el tiempo, se crearon dos ayuntamientos distintos, denominados Riotorto y Órrea, dentro de la provincia de Mondoñedo, hasta que ésta desapareció en 1822, pasando entonces a pertenecer a la provincia de Lugo. En el año 1940 se anuló el ayuntamiento de Órrea, agrupando el de Riotorto seis parroquias de las ocho actuales.
Riotorto no es un municipio de monumentales construcciones, pero su territorio está salpicado de interesantes templos parroquiales y numerosas capillas. Destacan la Capilla de San Bernabé y San Roque del séc.XI, en Espasante de Riba, y los artísticos retablos de las iglesias de Santa María y San Pedro en Meilán. En cuanto a la arquitectura civil, la torre del Mouro (siglo XVI) constituye su máximo exponente.
Riotorto es una tierra rural y sosegada. Sus prácidas paisajes convidan a panorámicas excursiones por las serras del Pousadoiro y Augaxosa y por los valles de los ríos Orrea, Eo y Torto.
El bretoñés Monte Carracedo distingue una panoramica de excepción del Cantábrico y el valle del Masma, abarcando geograficamente desde As Pontes hasta los Ancares. En alto del Carracedo, en el que abundan las reses de ganado en libertad, se había luchado una cruenta batalla contra las tropas napoleónicas en el séc.XIX.
La gastronomía de toda la comarca ofrece al paladar deliciosos manjares basados en la sencilla y tradicional cocina gallega. Los derivados del cerdo de elaboración casera, la ternera, la caza mayor, las filloas y el queso completan el panorama gastronómico junto a la famosa tarta de Riotorto.
El apartado artesanal del municipio se concentra en el lugar de Ferreiravella, donde algunos herreros todavía elaboran aperos de primera necesidad, siguiendo las ancestrales tradiciones de sus antepasados.
Fiestas de gran popularidad son las patronales de San Pedro y Santa Isabel, el 29 y 30 junio en las Rodrigas. Dos semanas más tarde, en el segundo sábado de julio, el mismo lugar concentra una larga y devota fila de emigrantes, transportistas y conductores con el motivo de la bendición de sus vehículos en la honra de San Cristoval.
El segundo sábado de septiembre en la “Muxueira” la Feria Anual de “Augaxosa”, de vocación tanto comercial como gastronómica-festiva.